La Inaplicabilidad del Principio Regulativo

El Principio Regulativo (que nació durante la reforma protestante del siglo XVI) establece que los cristianos no deben hacer nada en el culto público de adoración a Dios que no este EXPLICITAMENTE ordenado por Dios en la Palabra, puntualmente en el nuevo testamento y más aún que sea un prescripción apostólica.

Por cierto EXPLICITAMENTE significa: Que está expuesto o dicho de forma clara y detallada, sin insinuar, suponer, ni inferir nada. 

Pero… ¿Se puede llevar en la actualidad el Principio Regulativo?

¿Cómo saber cuándo una iglesia se aparta del Principio Regulativo y pasa a adoptar el Principio Normativo?

A continuación daré una lista de cosas e implementos que de usarse en el culto a Dios hacen (por definición) dejar el Principio Regulativo:

·      → Si hay servidores que reciben a la gente (ujieres). Si hay proyección de cantos o himnos, o utilizan himnarios. Si utilizan quipo de audio y video. Si hay grupo de alabaza y coro. Si utilizan bancas o sillas, pulpito o atril para colocar la biblia. Entre otras cosas más.

·      → Si piden diezmos u ofrendas, primicias o promesas. Si bautizan niños. Si tienen escuela para niños, cuneros, escuela bíblica. Si tienen diversos ministerios: de mujeres, de varones, de jóvenes etc.

·      → Si celebran bodas, presentaciones de niños y funerales. Si celebran el nacimiento de Jesús (navidad) o la resurrección de Cristo, o si celebran algún día festivo tradicional: al padre, a la madre, al niño, a la patria etc.

Si en tu iglesia hacen o llevan a cabo algo de esto, tu iglesia no sigue el Principio Regulativo pues recordemos que este principio establece que solo se debe hacer lo que Dios ordeno EXPLICTAMENTE y si conoces la Escritura sabrás que nada de esto esta explícitamente ordenado por Dios.

En definitiva yo creo que es imposible llevar el Principio Regulativo, es inaplicable debido a (como ya dije) cuestiones temporales, culturales y prácticas. Si quisiéramos ceñirnos estrictamente al principio regulativo, deberíamos entonces tener reuniones diarias, partir el pan, participar de las oraciones en las casas y por el templo (Hch 2:46). Además en el nuevo testamento vemos que había participación de todos, todo el que trajera una profecía, una palabra (doctrina), revelación etc. (1Co 14:26-31); Un himno, un cántico espiritual, un salmo (Efe 5:19). Pero en la actualidad no he visto una sola iglesia que haga esto sino que la palabra y los himnos o canticos están designados a ciertos hermanos.

Como dato histórico el padre de la reforma protestante Martín Lutero, se ceñía al Principio Normativo, él fue de los primeros que propuso esta forma de culto y adoración a Dios.

Por cierto, el principio normativo es la facultad de hacer e implementar en nuestros cultos de adoración cualquier cosa que no esté explícitamente prohibida por Dios en la Biblia, siempre y cuando provenga de una sana y justa inferencia de la Palabra; No vaya en contra de la doctrina, la justicia y las buenas costumbres, el orden y el respeto. Sino que sea buena, prudente, y propicia para el buen desarrollo del culto a Dios, todo en el temor de Dios.

 

¡Bendiciones!

                                                                                        15-Oct-21





















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